ESTE OTOÑO

Este otoño de luces y oscuridades, lleno de sonidos y de cortos silencios; este magnífico otoño, suave, templado, es como una caricia en el cuello que recibo con los ojos cerrados y la cabeza reclinada.
Este espacio de tiempo, de los primeros días de Octubre es un lento y dulce caminar hacia la inmensidad de la unión con lo que amo.
Este otoño de mi vida es un puente entre la soledad y la dicha que me  ha regalado el destino y está lleno de colores y sueños adolescentes que están por complir. Es como una pompa de jabón lanzada al aire por un niño en su juego.
Es, este fabuloso mes, un transcurrir sereno de sencillos acontecimientos que desembocarán en la paz de mi mar personal.
Te ofrezco este otoño a tí, solo a tí.

LA QUE SUEÑA

Esa mujer que cierra los ojos para vivir es una ilusa, inconsciente y psicópata condicionada por circunstancias poco favorables mantenidas en el tiempo y, fundamentalmente, porque en su cerebro solo funciona un hemisferio.
Todas sus metas, inalcanzadas por su naturaleza platónica; lo alcanzado se le regaló, tuvo mucha suerte.
Aquella niña tan bonita frustró algunas espectativas que luego van siendo saldadas con creces y nadie podría decir lo contrario sin equivocarse. Es por eso y porque sabe amar, es amada.
Nadie ahora, sintiendo sus ensoñaciones, sería capaz de no adorarla.
Esa preciosa mujer que vive dentro de ella tiene mucho dado y mucho por ofrecer, se puede demostrar y todos lo saben y ella también. 
No hace falta demasiado tiempo para acariciar los deseos, para que se materialicen, tampoco para entregarse a lo querido hace falta mucho tiempo; creo que esa mujer lo conseguirá más pronto que tarde porque las señales ya las está dando y, así será añorada después.

 Un año más acordándome de mi padre