SOLEDAD

Casi siempre creemos estar solos y no lo estamos jamás.
Muchas veces nos sentimos solos y no nos damos cuenta que estamos equivocados; lo que sentimos es un no saber lo que queremos o como lo queremos o por último, no poder conseguir con rapidez lo que deseamos.
Este sentimiento nos vacía el espíritu, nos vacía la mente, nos deja sin memoria y hasta sin unas simples palabras.
Este sentimiento nos produce una falsa muerte momentánea, es como el que se está ahogando con una espina en la garganta y cuando más asustado está, alguien se la saca y se le olvida rápidamente lo que ha sucedido.
La soledad es uno de los sentimientos más rechazables de nuestro vocabulario de sentimientos, por lo que tiene de absurdo cuando hay , aunque sea, una sola persona que te quiere escuchar, que te ofrece su pecho para apoyar la cabeza.
Vamos a destruirla con nuestras propias armas y con las que nos ofrecen los que nos aman y a los que amamos.
Matémosla en este mismo instante.