LAGRIMAS

Hoy , una lágrima que arrastra un mar.
Una noticia algo más que triste, una sensación de que "alguien" se puede empezar a alejar, se puede empezar a desprender de la piel de mi alma.
Me escuece esa parcela de piel.
Vienen a mi memoria los olores y sabores de la infancia más tierna, de la adolescencia más inocente y rebelde, del comienzo de la juventud más retraido.
Saltan al pensamiento las disputas de los dos seres que más se quieren, esos que más veces se miran y que se entienden con la mirada; todas, porque empiezan los intentos de independencia.
Hoy siento que ese ser está más cerca de mí que nunca porque tengo miedo a su ausencia, tengo miedo que me deje sola de ella.
He compartido y comparto toda mi vida con su cuerpo, cuyo olor es dulce; con sus pensamientos desorganizados y desconcertantes en ocasiones, con su caracter obsesivo y travieso al mismo tiempo, con sus peores momentos de dolor y con su amor sin fin.
Jamás quisiera dejar de hacerlo porque mi amor por ella es infinito. Ese "alguien" es mi madre.